Tengo que reconocer que Portugal no apareció en mi lista de sitios para las vacaciones de verano. Para mí era o huracán con olotes en Guincho, o agua plana con brisas suaves en Sagres. Pues.., equivocado estaba.
Entonces, para pasar unos días de windsurf en alcance de un quizas dos llenados de tanque de la furgo, los posibles destinos eran más bien escasos. Además, viajando con familia se esta algo limitado, porque lo más típico de los spots de windsurf es que la infraestructura es poca por un lado, y por otro, que estéticamente muchos spots se parecen a Marte en una tormenta de arena. Ni yo tuve ganas de esto...
Por casualidad en una conversación con un amigo cayo el nombre de Viana do Castelo.
Dicho y hecho…. en principios de Julio salimos direccion costa oeste de la peninsula.
1200 kilómetros aprox., la furgo cargada a tope con familia, equipo y mucha ilusión.
La previsión de viento era prometedora. Pero tampoco había prisas… nos acercamos a la costa poco a poco, paseando por Guimarães, la ciudad donde nació Portugal, después Braga, y Ponte de Lima. Las primeras impresiones del país han sido deslumbrantes. No me esperaba tanta flora en un julio caloroso. El termómetro del coche marcaba 38 grados e igual donde mirabas, todo estaba verde y abundante.
Llega el día que nos instalamos en Viana. El camping bastante bien.., lleno y algo apretado quizás. Me gustó sobre todo el espíritu deportivo que se notaba. Todos estaban o haciendo surf, windsurf o kite, y a falta de viento, salían con MTB o a correr.
El miércoles de nuestra llegada estaba muy nublado. No me pensaba nada, ya había leído de las famosas nieblas de Viana y me imaginaba que será así el clima del Atlántico. Para el día siguiente daban 12 nudos, que bajo condiciones normales no me harían levantar de mi silla de camping, pero a la Nortada de Viana se debe añadir unos 12 – 15 nudos mas.
Jueves. Nos levantamos con más nubes y niebla que en el transcurso del día se espesan a una sopa turbia de gris. Sobre las 2 de la tarde salen las primeros rayos del sol y los arboles empiezan a moverse. Al instante empiezan bajar las primeras velas a la playa. Estaba para 100 litros y vela de 5.2. Me espero. No tengo material tan grande y, en fin, habia venido para salir con viento fuerte. Sin embargo, el viento desapareció con la misma rapidez con que habia entrado.
El resto de la tarde ha sido un diluvio acompañado por tormenta eléctrica. No me inqieta, que acabamos de llegar y yo confio que ya soplaría.
De programa alternativa tampoco no faltaba. Enseguida estas en el pueblo cruzando el rio Lima. Se come estupendamente por un precio bastante asequible. Viana es una ciudad pequeña y muy pintoresca. Viernes nos buscamos sardinas frescas en el puerto. Sardinas a la brasa junto con un viño verde compensan cualquier día sin viento.
Sábado mas niebla y salida en MTB. Domingo, más niebla como habitual, pero ya me daba igual. Había hecho amistad con el viño verde mientras tanto y del viento casi no me acordaba.
Lunes motín. La familia quiere otra cosa que las playas londinenses de Portugal. Recogemos y vamos a Oporto. Desde un camping donde el factor de recreo crece con el aumento de dejadez, a la ciudad. Tocaba cambio de chip.
Conocía Lisboa de otra ocasión y es bonito.., pero Oporto, bff... una joya. Las casas de todos los colores reflejándose en el rio Duero. Espectacular! Nos quedamos un par de días.
Para miércoles la previsión de viento volvía a la carga y daba viento fuerte. Lo que recuerdo de muy agradable, es la cercanía de Oporto hasta las playas de Viana. Unos 80 kilómetros e ya navegas. En los días sin viento puedes patear las calles de Oporto y si sopla la Nortada en una horita estas en agua. La perfecta combinación entre vida salvaje de playa y civilización.
Miércoles. Esta vez la previ no defraudaba. Monto vela de 4 y tabla de 90 litros. El baño en el Atlántico se hizo esperar, pero disfruté como un nene pequeño. El día siguiente niebla para variar… mi animo cae al sotano. Milagrosamente mediodía sale el sol y poco después el viento. Cae otra sesión con vela de 4.7.
De casi dos semanas en Portugal, 2 días para navegar con viento de fuerza 7 - 8. A lo mejor, con equipo grande, hubieran sido tres días mas. Quizás me esperaba un poco mas tiempo en el agua, pero aún así, las dos sesiones han sido fantásticas. Impresindible traerse tabla de sup. Las condiciones por la mañana para una sesion de surf estaban espectaculares. El tamaño de ola es perfecto para enfrentarte a tus primeros bottoms... y si ya dominas, también encuentras lo que buscas.
En barlovento cerca del puerto hay agua planita para slalom o Freestyle. Con cada metro más a sotavento más olas tendrás. Tú escoges en función de tu nivel. Pero en cualquier caso las olas son muy accesibles, por lo menos en verano. Medida entre medio metro hasta algo más que metro y medio. Y ojo, es el Atlántico, todo depende de las mareas. En internet se encuentra tablas de las mareas. La ola esta mejor con marea baja, con marea alta se queda en un poco de shorebreak como mucho.
Para mí gusto y para mi nivel uno de los mejores spots donde he podido navegar...
Hay de todo. La combinación idónea de un spot de windsurf bien completito y un entorno precioso de naturaleza intacta con el agradable clima del Atlántico. Aparte la fácil conexión entre vacaciones de playa o ciudad. Y todo esto sin gastarte una fortuna. Definitivamente un sitio para volver.
1 Zona puerto - agua plana - zona de slalom
2 Praia do Cabedelo - zona de agua plana / bump&jump
3 Praia de Rodanho - zona de Olas
4 Zona Camping
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silvana sieiro (jueves, 11 abril 2019 23:10)
hola!!! queria saber si alquilais material para hacer windsurf en zona de agua plana, ya que aun estamos aprendiendo y vamos sin harnes y vela pequeñas.
estaremo en viana el lunes 22 de abril.
si me puedes informar!
gracias!
Alberto (sábado, 11 mayo 2019 22:16)
Quería saber si alquiláis material para hacer windsurf para dos personas